12 Noviembre 2024

Sector energético: desafíos y oportunidades en la transición hacia la sostenibilidad

Carlos Zuloaga, Global Sector Head of Energy

El sector energético enfrenta grandes desafíos, como el cambio climático y una demanda global de energía que no para de crecer. El futuro del sector pasa por la sostenibilidad y la innovación, con más electrificación en el transporte e industria, mayor uso de energías renovables y mejoras en almacenamiento y eficiencia. Unas inversiones en energías limpias que ya superan los US$ 2 trillion anuales y seguirán creciendo fuertemente hasta superar los US$ 4,5 trillion anuales en 2030 en un escenario de Net Zero Emissions. La financiación global y la inversión en investigación serán cruciales para una transición energética exitosa.


En los últimos años, los inversores han observado con especial atención a las empresas pertenecientes al sector energético por motivos evidentes: son las principales protagonistas de la transición energética y cargan con una gran responsabilidad por crear un futuro más sostenible para la sociedad en su conjunto. Entender sus ambiciones de crecimiento, compromisos para conseguir reducir las emisiones y la forma en la que se utiliza y produce la energía en última instancia son requisitos obligatorios para ofrecer un servicio de asesoramiento excelente y bien enfocado.

Estamos viviendo tiempos muy convulsos, con una escalada de conflictos como el de Oriente Medio o la guerra de Rusia en Ucrania, regiones con un peso muy relevante en la producción de energía, y que vuelve a poner de manifiesto el consabido trilema de la necesidad de equilibrar la seguridad de suministro, el acceso a una energía limpia, y que sea a unos precios competitivos que permitan el crecimiento económico y desarrollo social. 

Asimismo, la velocidad del desarrollo de la energía sostenible se ve impactada por las políticas públicas de los diferentes gobiernos y organismos, con claros ejemplos como el IRA en Estados Unidos o REPower EU en Europa, y su capacidad de implementar los necesarios subsidios, permisología y metas que canalicen la inversión de forma eficiente. Curiosamente en 2024 se van a celebrar elecciones gubernamentales en países que representan más de la mitad de la demanda mundial de energía. 

En este contexto, sigue existiendo una importante inversión en Oil & Gas (O&G), pero la inversión en energía limpia está creciendo a tasas no vistas anteriormente, con cifras que doblan la inversión en O&G y superan los US$ 2 trillion anuales. 

Asimismo, se espera que la demanda de energía siga creciendo acompañando el crecimiento económico, pero con un consumo mucho más eficiente. Ese crecimiento vendrá acompañado de un importante cambio en el mix energético, fuertemente impulsado por la electrificación. La generación renovable será la fuente que crezca con mayor fuerza, doblando su cuota hasta el 25% en 2030; mientras que el O&G debería alcanzar su pico en este periodo.

Seguir financiando este crecimiento es de suma importancia para poder cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible pactados. Carlos Zuloaga, responsable global de Energía de BBVA CIB, explica: “Aunque la actividad ha crecido considerablemente, aún queda mucho por hacer. Se requieren inversiones muy importantes, no solo en generación limpia, sino también en redes que permitan la electrificación de la economía. En la pasada COP 28 se comprometieron a triplicar la capacidad renovable instalada para 2030, alcanzando los 11.000 GW, lo que implica duplicar la inversión anual de los últimos años e invertir más de €650 mil millones anuales en redes. Estos aumentos de capacidad serán clave para responder a la creciente demanda eléctrica, impulsada también por el auge de los centros de datos y la inteligencia artificial”.

Con la sostenibilidad y la innovación en el centro de su estrategia, BBVA está comprometido no sólo a situar al cliente en el centro de sus decisiones, sino también a sorprenderlo con una experiencia única. Para lograrlo, es fundamental acompañar a los clientes con un profundo conocimiento sectorial, que permita anticipar tendencias clave y ofrecer soluciones adaptadas a sus necesidades. Estas soluciones abarcan un amplio espectro, desde asesoramiento estratégico integral (equity, deuda, ESG) y financiación competitiva, tanto bancaria (financiación estructurada y corporativa) como a través de los mercados de capitales (bonos públicos y privados, colocaciones de capital) y agencias de crédito a la exportación, sin olvidar las soluciones transaccionales y de cobertura, aprovechando la presencia de BBVA en más de 25 países. Todo ello, con el objetivo de ayudar a los clientes a crear valor para sus accionistas y grupos de interés, con un equipo experto y transfronterizo que los apoye en sus ambiciones de crecimiento sostenible y optimización del capital.

La innovación, un catalizador de la sostenibilidad para las empresas energéticas

La supervivencia a largo plazo de las compañías más intensivas en emisiones de carbono pasará por hacer esfuerzos importantes en el campo de la innovación. ¿En qué se deberá enfocar esa innovación? Además de profundizar en la electrificación del transporte e industria y gestionar la intermitencia de la generación eléctrica renovable con baterías, es necesario descarbonizar el resto de la demanda. Para ello, son fundamentales las inversiones en tecnologías que desarrollen el hidrógeno verde, los biocombustibles, el biogás o los gases renovables, complementadas con la captura, transporte y almacenamiento de C02 (CCUS). 

Aunque varias de estas tecnologías están ya disponibles, requieren de inversión y modelos de negocio colaborativos para alcanzar escala y competitividad, necesarias para dar respuesta a un consumo energético sin emisiones. Y por otro lado, la apuesta por la innovación es crítica para seguir desarrollándose, junto a otras alternativas como la energía nuclear modular (SMR). Según Zuloaga: “Las compañías energéticas enfrentan un gran reto, pero, sobre todo, una oportunidad única para liderar la lucha contra el cambio climático, aprovechando su fortaleza financiera, su conocimiento tecnológico, su liderazgo y su capacidad de innovación. Además, cuentan con el respaldo de fondos de inversión con gran liquidez y experiencia industrial, un ecosistema de venture capital dinámico y bancos como BBVA, comprometidos en apoyar a los clientes que desean llevar a cabo la necesaria Transición Energética”.

Una gran mayoría de compañías energéticas han definido estrategias con objetivos claros de descarbonización, y con la innovación como impulsor del cambio. BBVA CIB está comprometido a ayudar a estas empresas a conseguir sus objetivos de financiación e inversión en tecnologías que permitan avanzar hacia un futuro más sostenible y convertirse así en un socio estratégico de nuestros clientes del sector energético.